José llevaba toda la vida en la misma escuela y ahora estaba en secundaria, tenía muchos amigos y se podría decir que era bastante popular. Los demás lo querían y lo aceptaban. Era un joven responsable y buena persona, un líder positivo. Sin embargo, cuando Roberto llegó a la escuela todo cambió…
Los primeros días se hicieron grandes amigos y les encantaba estar juntos para cualquier cosa que pudieran hacer, entraron juntos al taller de tae kwon do y como eran muy buenos en este deporte todos les temían y respetaban. El problema vino cuando a Roberto se le ocurrió hacer un club de terror on-line. Le propuso a José que juntos encontraran a otros compañeros para molestarlos y burlarse de ellos pensando que era una forma divertida e inocente de pasar el día.
José se negó, pues aunque sabía que no los golpearían, el simple hecho de poner apodos y difamar en línea es doloroso y no quería hacerlo. Al negarse, Roberto estalló en cólera, estaba irreconocible, nunca pensó que alguien tan encantador fuera a tener un arranque así.
- ¿Qué te pasa Roberto? Tú no eres así, dijo José con terror.
- ¡Mira estúpido! Tú no sabes nada de mí, ¡nada!, gritó.
- ¡Cálmate! Yo así no me llevó contigo, se levantó de golpe mientras que Roberto lo jaló del brazo y comenzó a golpearlo.
Ambos sabían pelear, pero Roberto era mayor en fuerza y tamaño, así que José terminó en el piso, Roberto le mostró una imagen muy comprometedora cuando José estaba borracho y con una chava que no era su novia en pleno beso…
Desde hace unos años hemos visto faltas de respeto en redes sociales cada vez más lamentables. Uno de los casos que llama la atención es el de Veracruz, donde cuatro “juniors” que violaron a una joven. Los padres de la joven establecieron contacto con los padres de los victimarios, quienes muy alarmados por su conducta prometieron enmendarlos, llevarlos al psicólogo y atender esta lamentable situación. Poco después de desdijeron de lo acodado, calumniando a la joven al decir que todo era una mentira para sacarles dinero… Esto lo declararon a pesar de estar grabadas las declaraciones de sus hijos pidiendo perdón a la chava.
Por supuesto que los papás de la víctima, ante esta falta de ética de los padres, ahora sí están enfurecidos y pidiendo se haga justicia con todo, al grado que ya es nota nacional que pide al gobernador que haga algo en contra de los violadores.
Ante este lamentable, y cada vez más frecuente hecho, me quedo pensando ¿cómo unos jóvenes educados y con todas las posibilidades del mundo para hacer una vida bonita, se hacen de este nivel de problemas al cometer semejante falta? No me queda claro que tuvo que pasar en sus vidas para que en plena juventud se les ocurriera violar colectivamente a una compañera… ¡Y luego me acordé! Claro, ahí está la porquería de video juego titulado Grand Theft Auto, en sus versiones San Andrés, Vice city, etc… mejor conocido por sus siglas como GTA (se pronuncia ji ti ei, en inglés) y ahí me cayó el veinte.
En pasados días estaba tramitando mi pasaporte, sentada en la primera fila frente al mostrador, pues llevaba a mi bebé, la carriola y todo el instrumental que se usa para salir con estos diminutos infantes que ¡necesitan de todo! En eso estaba, cuando se sentaron junto a mí un par de señoras ya mayores, muy agradables por cierto, con quienes entablé una conversación mientras esperábamos nuestros respectivos turnos. De pronto, llamaron a una de ellas, quedando su lugar vacío. A los pocos minutos una joven de unos veinte años ocupó su lugar sin fijarse si alguien estaba ahí sentado y sin preguntarnos nada al respecto, ella sólo estaba preocupada por sí misma.
Un momento después regresó la señora. Yo estaba segura que esta chamaca se iba a levantar y regresar su asiento a la señora, pero cuál sería mi sorpresa cuando al verla de pie junto a su amiga no hizo gesto alguno y siguió tan campante. Yo al ver esto, le dije varias veces: “oye, oye, oye” y la escuincla se hizo como que nunca me escuchó… Para llamar su atención le toque el hombro y por fin se digno en voltear a verme. Le pedí amablemente que le dejara el lugar a la señora pues ella estaba ahí antes. Juré que en seguida pediría disculpas y se levantaría, pero cual sería mi sorpresa cuando me dijo con tono prepotente intentando ser fresa VIP: “Aquí no había nadie y no me voy a mover”.
Las señoras y yo, además de toda la gente de las filas cercanas, nos quedamos en shock… Creo que todavía no puedo cerrar la boca de la impresión que esta actitud me causó. De nuevo le expliqué que la señora estaba antes y que era una señora mayor, que por favor se levantara y le mostré que había otros lugares unos cuantos pasos atrás. Cínica y grosera se negó de nuevo… Todos estábamos muy sorprendidos, yo le dije que le daría mi lugar pero llevaba a un bebé en brazos y me dijo: “¿Y eso qué?”. Así tal cual. Total que una señora de la fila de atrás le dio el lugar a la señora y seguimos platicando del asunto muy ofendidas por supuesto.
La niña malcriada comenzó a llamar por celular casi a gritos, mostrando más de su grosería, ya que para escuchar cuando llaman los turnos se debe estar con voz moderada por respeto a los demás y para no perder el turno. De pronto dejó de hablar y dejamos de prestarle atención.
Respecto al bullying mucho se ha hablado y mucho se ha propuesto, todos sabemos que es el acoso que se da de forma constante, contra alguien y con intención. Para mí si tu hijo o hija se queja de algo que le pasa en la escuela dos veces a la semana, por dos semanas, es suficiente para ir a la escuela a hablar. No te esperes a que la situación empeore, aunque la queja sea que no lo dejan jugar, ve y levanta un ACTA DE HECHOS.
Para mi la meyor solución es hacer cita formal con la escuela, en donde participan de preferencia dos personas de la escuela que puede ser un docente y un director donde se establezcan compromisos de mejora en una fecha próxima. La autoestima del alumno no puede aguantar largas esperas, es necesario que se le proteja de inmediato.
FORMATO DE REGISTRO DE CITA ESCOLAR
ACTA DE HECHOS
FECHA: ____________________________________________________
ESCUELA: __________________________________________________
PARTICIPANTES: __________________________________________________________________
Favor de ser lo más claro y conciso posible: |
NARRE LOS HECHOS NARRADOS POR LOS PADRES (ANOTA EL RESPONSABLE DE LA ESCUELA)
LA SITUACIÓN DESCRITA ES CONSTANTE (2 VECES A LA SEMANA): SI NO
LA SITUACIÓN DESCRITA ES INTENCIONAL POR PARTE DEL AGRESOR: SI NO
LA SITUACIÓN DESCRITA ES HA BAJADO EL RENDIMIENTO DEL ALUMNO: SI NO
Favor de ser lo más claro y conciso posible: |
NARRE LAS ACCIONES A LAS QUE SE COMPROMETE LA ESCUELA (ANOTA LOS PADRES DE FAMILIA)
FECHA DE SEGUIMIENTO: ___________________________________________________________
NOMBRE Y FIRMA PADRES DE FAMILIA: ________________________________________________
NOMBRE Y FIRMA RESPONSABLE DE LA ESCUELA: ________________________________________
SACAR UNA COPIA O FOTOGRAFÍA DEL PRESENTE DOCUMENTO Y GUARDAR COMO EVIDENCIA DE ANTESCENDENTE DE BULLYING.
Dados los lamentables acontecimientos del 14 de agosto, al sur de la Ciudad de México, donde un grupo de 40 jóvenes de entre 14 y 17 años acosaron, humillaron y grabaron a la joven de 16 años Ainara Suárez, muchas reflexiones se derivan al respecto. El video de la grabación fue subido a redes por una madre de familia quien quiso denunciar los hechos y en unas horas se hizo viral.
La primera reflexión es ¿cómo surge el pleito? Y esto a muchos nos sorprenderá saber que ellas no eran compañeras de clase, ni amigas, ni enemigas, ni rivales de amores… ellas se conocían de fiestas y sólo a la ligera, pero comenzaron a seguirse en la red social Instagram. Ainara, la víctima, publicó fotos sensuales y con desnudos en su perfil, que su agresora consideró inapropiados y a partir de ello comenzó a agredirla por este medio con palabras ofensivas como “zorra” entre muchas otras. Ainara se defendió de los insultos una y otra vez hasta que quedaron de verse para “que se lo dijera en la cara”, según palabras textuales de la víctima.